El «Viernes Negro» se acerca rápidamente, ya que el 25 de noviembre marca el inicio de la temporada navideña de compras por excelencia, con una avalancha de ofertas que hace que muchas personas no puedan resistir la tentación de comprar durante estas fechas festivas, lo que conduce a un consumo generalizado.
Sin embargo, no todo lo que brilla es oro, y las compras durante este día de descuentos pueden resultar más costosas de lo esperado. En este sentido, estar expuesto constantemente a anuncios de productos con grandes descuentos durante estas fechas puede incitar a las personas a comprar cosas que realmente no necesitan solo porque parecen una ganga.
«Elaborar una lista de las cosas que nos gustaría comprar de antemano y establecer un presupuesto para ello puede ayudarnos a resistir la tentación de comprar de manera impulsiva. De esta manera, reduciremos las posibilidades de que un descuento en el precio de un producto nos desvíe de nuestra idea inicial», explican desde el Banco de España.
Además, en ocasiones, el descuento anunciado puede no ser tan bueno como parece, ya que muchos comercios aprovechan el auge del «viernes negro» para aumentar sus precios, y los productos que realmente experimentan descuentos son muy pocos. De hecho, en 2021, un tercio de las tiendas aumentaron los precios de los productos en este día de rebajas, mientras que solo un 11,8% los redujo, lo que resultó en un aumento promedio del 3,3%, según datos de la OCU.
Consejos del Banco de España
Dado que esta temporada puede presentar más riesgos de los que se esperan, el Banco de España ha proporcionado una serie de consejos para que las personas mantengan su estabilidad financiera:
– Si alguien está considerando financiar la compra de un producto, es importante prestar especial atención a las ofertas que anuncian «sin intereses». Esto significa que la tasa de interés nominal o TIN es cero, pero puede haber otras comisiones asociadas al costo total. Si se opta por financiar la compra, debe hacerse de manera responsable y asegurarse de que se podrá pagar la deuda en el futuro, para evitar un impacto negativo en la situación financiera.
– Al pagar con tarjeta, no es lo mismo utilizar una tarjeta de crédito con pago aplazado que una tarjeta de crédito regular. Los intereses, comisiones y plazos para devolver el importe varían según el tipo de tarjeta que se utilice. En el caso de las compras con tarjeta de débito, el importe se descuenta inmediatamente del saldo de la cuenta, aunque es posible que el banco permita un sobregiro. Por lo tanto, es esencial verificar que se dispone del saldo suficiente antes de efectuar cualquier pago.
– Cuando se realiza una compra en línea, el consumidor debe ser especialmente cauteloso y asegurarse de que el sitio web donde realiza la compra sea seguro y confiable.
– A pesar de que cada vez más comercios ofrecen la opción de pagar en cuotas compras de pequeño valor, es importante recordar que postergar el pago conlleva cargos adicionales que deben pagarse en los próximos meses.
